Toda la Universidad conoce que nuestro Sindicato ha dedicado la mayor parte de su historia a defender el derecho a la estabilidad y al trabajo de todos los trabajadores universitarios, en contra del sinnúmero de injusticias e infamias que través del tiempo contra esos derechos han cometido autoridades, directores. jefes y jefecitos de esta Institución.
Hoy asistimos a una ola de despidos de humildes trabajadores que en la mayoría de los casos no tienen justificación alguna, otros son por venganza política, caprichos y odios viscerales de personas que ocupando un puesto de mando circunstancialmente, se creen dioses para señalar, juzgar, condenar y, satisfaciendo sus actos perversos dejar sin sustento a familias enteras.
El SINTUP reconoce que en esta administración universitaria la mayoría de estas acciones de crueldad y maldad se han limitado gracias a la política humanista del Rector, que en su primer período se rehusó a escuchar los pérfidos consejos de "cabezacalientes" que exigían el despido masivo de trabajadores. Sin embargo, en este período han vuelto a retomar fuerza esos señores que creen ha llegado la hora de consumar sus bajos instintos.
Tal es el caso del IEA, donde el nuevo director, profesor Goy Navas con más de 50 años de servicio y una actitud despreciable, pretende justificar su accionar criminal de despedir injustamente 4 trabajadores, sobre la base de un discurso de cambio y renovación tardía, donde según él necesita incorporar personal de alto perfil graduado en universidades europeas (los Plus Ultra de la ciencia y la investigación), pero que lamentablemente no cuenta con partidas para ello. De allí que no le quedó más remedio que dejar sin su pan a 4 trabajadores, incluyendo una joven embarazada.
Como en todas las ocasiones que el Sindicato sale en defensa de los derechos de los trabajadores, apelamos primero al diálogo, la comunicación y el entendimiento en búsqueda de una solución negociada. Sin embargo, para algunas autoridades esas gestiones caen en oídos sordos y prefieren mantener actitudes arrogantes, inhumanas y desafiantes. Ante esta situación al SINTUP no le queda otra alternativa más, que iniciar una lucha sostenida y vertical para exigir justicia ante los despidos criminales.
Aquí invitamos al Rector para que detenga, en base a su mandato constitucional y estatutario, estos desmanes y atropellos revestidos de venganza y odios políticos contra los trabajadores, que están ensuciando la credibilidad de la Institución y que no solo están ocurriendo en el IEA, sino también en la facultad de Humanidades, el Centro Regional de Bocas del Toro, extensión de Arraiján, Facultad de Ciencias, sin piedad el Decano mantiene el despido de una compañera embarazada violentando normas nacionales e internacionales que protegen a las mujeres.
Nuestro Sindicato quiere reconocer públicamente que la gran mayoría de las autoridades universitarias escucharon la voz de la organización y han brindado oportunidades a los trabajadores eventuales, demostrando tener plena conciencia y humanidad especial en este contexto pandémico. No obstante, para los otros casos donde sigue imperando la soberbia y la indolencia, advertimos que el SINTUP se reserva el derecho de todas las acciones que sean necesarias para el logro de la paz y la justicia social.
¡SIN LUCHAS NO HAY VICTORIAS!
Dado en la ciudad universitaria "Octavio Méndez Pereira" el 1 de febrero de 2022.
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