Han culminado las elecciones universitarias para el período 2021-2026 y como siempre ocurre en estos procesos, unos candidatos son favorecidos por el voto y otros no tanto. Sin embargo, como todos son parte de la gran familia universitaria, el SINTUP les extiende sus felicitaciones más sinceras, principalmente a los ganadores de este torneo electoral, a los que exhorta a deponer las diferencias que pudieran haberse creado al calor del proceso y a convidar a todos, adversarios o no, a trabajar por la reconstrucción de la unidad y la paz entre universitarios, para beneficio de Facultades, Centros Regionales y de la propia Universidad.
En nuestra organización somos muy conscientes que estas elecciones han provocado heridas que tardarán un tiempo para restaurarse. Por eso todo lo vivido en este proceso electoral sólo viene a confirmar una vez más, la certeza principista en nuestra decisión de mantener al SINTUP, como sindicato representativo de todos los trabajadores universitarios, alejado de las opciones políticas electorales en pugna. La independencia, la credibilidad y la solidez del SINTUP han salido de estas elecciones extraordinariamente fortalecidas.
Habría que decir también en estos casos, cuando se espera que las pasiones políticas regresen a sus niveles normales, instamos, ahora que han culminado las elecciones, a encontrarnos en el único terreno donde la Universidad se enaltece y se hace grande: en el terreno creador, fecundo y transformador.
La Institución está urgida de cambios en todos sus aspectos y en ellos todos tenemos la obligación de sumarnos y aportar. Nadie debe ser excluido ni está permitido autoexcluirse. Toca a las nuevas autoridades, desde el Rector hasta los decanos y directores de centros regionales, crear las condiciones para que la obra que aguarda emprender sea posible con el concurso de todos.
Eso presupone, sin dudas, que las críticas sinceras y respetuosas que durante todo el proceso electoral se vertieron sobre la gestión universitaria, por mucho que no fueran de nuestro agrado o algunas parecieran hasta irreverentes, sean consideradas con objetividad e imparcialidad. Eso también nos fortalece como universitarios. Eso también hace Universidad.
¡SIN LUCHAS NO HAY VICTORIAS!
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